Hasta siempre, Cory Monteith.

El domingo pasado hice click en un enlace que me llevó a un perfil de Twitter y fue entonces cuando me fijé en los Worldwide Trends y me encontré con #RIPCoryMonteith y #PrayForLea. 

Al principio creí que era una de las típicas bromas macabras que acaban colapsando Twitter de gilipolleces insensateces pero, poco después, descubrí que era cierto. No podía creérmelo (y aún me cuesta, lo admito).

Sabéis que sigo la serie (aunque no sea precisamente fan de ella y cada vez la repudie más) y esta noticia me ha tocado la fibra sensible. Tan joven y talentoso, dejó a medio mundo sorprendido y apenado por su muerte.

Chris Pizzello/AP

Cory Monteith, conocido principalmente por ser uno de los protagonistas de Glee y formar parte del elenco de películas como Monte Carlo, ha fallecido el pasado fin de semana a la edad de 31 años en un hotel de Vancouver.

El canadiense estuvo jugueteando con las drogas desde muy temprana edad. Comenzó con tan sólo trece años y ya con diecinueve acudió por primera vez a rehabilitación, volviendo por segunda vez hace varios meses, con trágico resultado. Todos nos merecemos una segunda oportunidad y él intentó ganarse la suya, aunque al final no lo consiguiera.

Algo que no se me va de la cabeza y me ha hecho pensar mucho es su relación con Lea Michele y en cómo lo debe de estar pasando ella tras lo ocurrido. Estaban en el mejor momento de su relación y se notaba el amor que había entre los dos cuando se miraban. He leído por ahí que ella no deja de escuchar sus grabaciones de voz y que se niega a creer que se haya ido para siempre. 

Tiene que ser durísimo perder al amor de tu vida de esa manera tan repentina, que la persona de la que estás perdidamente enamorada se vaya sin despedirse cuando todavía os quedan tantas cosas por compartir.

El fallecimiento de alguien es un recordatorio de lo rápido que pasa la vida, de cuánto tienes que aprovechar cada momento de ella. Pero el fallecimiento de un joven con media vida por delante sería como utilizar un subrayador fluorescente sobre el recordatorio anterior, para que nos fijásemos bien en él y no dejemos pasar ese gran consejo de vivir y disfrutar cada momento de nuestra vida, dure lo que dure lo esta.

Como pequeño tributo a Cory me gustaría dejaros una cover de una canción de Journey que me gusta mucho y que, curiosamente, es la primera y última canción que Finn Hudson (personaje que interpretaba Cory en Glee) cantó con New Directions, en el episodio piloto y en 'Sweet Dreams' respectivamente.

Recordad: Luchad por vuestros sueños y disfrutad cada segundo de vuestra vida. Habrá días peores y días mejores, pero cualquiera de ellos puede ser el último y debemos despedirnos de una buena forma y dejar un bello recuerdo de nosotros.

Descansa en paz.

11-05-1982

13-07-2013